El mesotelioma es una forma rara y agresiva de cáncer que afecta al revestimiento protector (mesotelio) de los pulmones, el pecho, el corazón, el abdomen y los testículos. La enfermedad suele clasificarse en cuatro tipos. Se trata del mesotelioma pleural, pericárdico, peritoneal y tunica vaginalis. De estos tipos, el mesotelioma pleural es el más frecuente.
Por desgracia, el pronóstico suele ser malo debido a un largo periodo de latencia. El pronóstico fluctúa en función de lo avanzado que esté el cáncer. Los síntomas de la enfermedad suelen tardar entre 20 y 50 años en manifestarse. Para entonces, los pacientes de mesotelioma suelen tener más de 70 años. Cada año se diagnostica mesotelioma a unas 3.000 personas, y no tiene cura.
El mesotelioma está causado por la exposición al asbestos. El asbestos es un mineral fibroso, blando y natural. Sus diminutas fibras suelen quedar alojadas en la ropa o liberarse al aire cuando se las molesta. Entre las décadas de 1930 y 1940, los investigadores empezaron a notar una relación entre la exposición al asbestos y el cáncer. No fue hasta la década de 1970 cuando el asbestos se clasificó como contaminante peligroso del aire, cuando la Agencia de Protección del Medio Ambiente estableció la Ley de Aire Limpio.
Los fabricantes de EE.UU. hacían mucha publicidad de los resultados aparentemente perfectos de trabajar con asbestos. La sustancia tóxica era conocida por su resistencia al calor, al agua y a la electricidad. Como resultado, se utilizó como aislante para máquinas de vapor, turbinas, calderas, hornos y más. El asbestos se convirtió en un componente principal de la construcción de viviendas hasta la década de 1980. Los estadounidenses podían encontrar asbestos en el cemento, los materiales de alicatado y techado, el aislamiento de cables y muchos otros lugares.
Las personas con mayor riesgo de exposición al asbestos son los veteranos del ejército y los antiguos empleados con carreras industriales. La exposición pasiva al asbestos también puede aumentar las probabilidades de desarrollar la enfermedad. Los familiares que lavan o juegan con la ropa de los empleados de riesgo también pueden estar expuestos a las fibras tóxicas con el paso del tiempo.
El mesotelioma es una enfermedad complicada. Por ello, es fácil acceder a información errónea y creer los mitos más comunes. Aunque conocemos los efectos devastadores de la exposición al asbestos, Estados Unidos no ha prohibido su uso. Los empleados no tienen la culpa de que se les diagnostique mesotelioma. Los fabricantes no siempre advierten a sus empleados de los peligros del asbestos.
Aunque a las personas mayores se les diagnostica la enfermedad con más frecuencia, no son las únicas en situación de riesgo. También se ha diagnosticado mesotelioma a hombres y mujeres de entre 40 y 50 años. Para estas personas, recibir un diagnóstico de mesotelioma suele ser chocante, en parte, debido a su edad. Algunos pacientes de mesotelioma siempre han recibido un certificado de buena salud antes de ser diagnosticados. Debido a la lenta e indetectable aparición de los síntomas, puede coger desprevenidos a pacientes y médicos.
Aunque el mesotelioma puede afectar a los pulmones, el mesotelioma y el cáncer de pulmón no son intrínsecamente lo mismo. A diferencia del mesotelioma, el cáncer de pulmón suele desarrollarse como una masa dentro de los pulmones antes de extenderse a los ganglios linfáticos y otras partes del cuerpo. Además, las causas del cáncer de pulmón pueden incluir la genética, el tabaquismo, el asbestos y otras. Según la Asociación Americana del Pulmón, el tabaquismo es responsable de aproximadamente entre el 80 y el 90% de los casos de cáncer de pulmón. El asbestos es la única causa conocida del mesotelioma.
Entender cuándo es el momento de buscar asesoramiento legal es crucial si usted o un ser querido ha sido diagnosticado con mesotelioma. Cuando las familias se enfrentan a un diagnóstico de mesotelioma, el tiempo es esencial. Nuestros abogados en Vogelzang Law tienen más de 20 años de experiencia abogando por las víctimas del mesotelioma y sus familias. Contamos con el equipo y los recursos necesarios para determinar si usted estuvo expuesto al asbesto y buscar la compensación que merece.
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