Puede que el cáncer no tenga cura, pero hay medidas que puede tomar para prevenirlo. Uno de los métodos más eficaces son las pruebas de detección del cáncer. El objetivo es detectar el cáncer antes de que empiece a causar síntomas: si se detecta pronto, puede tratarse con mayor eficacia. En estos momentos, el cáncer es la segunda causa de muerte en Estados Unidos, sólo superada por las enfermedades cardiacas.
Si le preocupa, concierte una cita con su médico para hablar de los siguientes pasos.
¿Qué es un cribado del cáncer?
El cribado del cáncer se diferencia de otras pruebas diagnósticas en que puede ayudar a detectar el cáncer en sus primeras fases, antes de que aparezcan los síntomas. El tratamiento suele ser más eficaz y menos costoso para el paciente cuando se detecta en esta fase. En el caso de algunos tipos de cáncer, como el colorrectal y el de cuello uterino, los cribados pueden prevenir el cáncer identificando lesiones precancerosas para poder extirparlas antes de que se conviertan en cáncer. En general, se considera que los cribados son la principal razón por la que se ha producido un descenso constante de los casos de cáncer colorrectal en la última década.
Pruebas de detección del cáncer recomendadas
Los expertos y los médicos recomiendan varias pruebas de cribado diferentes:
- Cribado del cáncer de mama: Se ha demostrado que las mamografías reducen las muertes asociadas al cáncer de mama entre las mujeres de 40 a 74 años, concretamente en la franja de edad de 50 a 69 años. Los expertos sugieren encarecidamente que los cribados comiencen a los 50 años para las mujeres consideradas de riesgo medio.
- Cribado del cáncer de cuello uterino: Las pruebas del virus del papiloma humano (VPH) y de Papanicolaou pueden utilizarse solas o conjuntamente. Ambas pruebas previenen el cáncer de cuello uterino al identificar células anormales antes de que se conviertan en cáncer. Los expertos recomiendan que las pruebas comiencen a más tardar a los 21 años y terminen a los 65 para quienes no sean de alto riesgo y se hayan sometido a pruebas previas adecuadas.
- Cribado del cáncer colorrectal: Varias pruebas pueden ayudar a la detección precoz, como la colonoscopia, la sigmoidoscopia y los análisis de heces, que han demostrado reducir el riesgo de muerte por cáncer colorrectal. Tanto la colonoscopia como la sigmoidoscopia pueden prevenir el desarrollo del cáncer al detectar y extirpar crecimientos anormales del colon antes de que se vuelvan cancerosos. Los expertos recomiendan que las personas con un riesgo medio empiecen a someterse a pruebas de cribado entre los 45-50 y los 75 años.
- Cribado del cáncer de pulmón: El TAC ha demostrado reducir las muertes por cáncer de pulmón. Aunque son muchos los factores de riesgo que provocan cáncer de pulmón, el tabaquismo es la principal causa. Los expertos recomiendan que los fumadores actuales o empedernidos comiencen a someterse a cribado entre los 50 y los 80 años.
- Otras pruebas de cribado: Algunas pruebas no han dado resultados eficaces, pero pueden ofrecerse a quienes se sabe que tienen un riesgo elevado de padecer determinados cánceres.
- Análisis de sangre de alfafetoproteína: se utiliza para detectar el cáncer de hígado.
- Resonancia magnética de mama – para mujeres portadoras de una mutación perjudicial en el gen BRCA1 o BRCA2.
- Prueba CA-125 – realizada junto con una ecografía transvaginal, puede utilizarse para detectar precozmente el cáncer de ovario.
- Exámenes clínicos de las mamas y autoexámenes regulares de las mamas.
- Pruebas de detección multicancerosa: las pruebas de detección multicancerosa miden señales biológicas en los fluidos corporales que pueden desprender las células cancerosas. Dependiendo de lo que mida la prueba, puede señalar varios tipos diferentes de cáncer y son eficaces para el cribado del cáncer en personas sin síntomas. Sin embargo, la falta de resultados y de aprobación por parte de la FDA hace que las pruebas MCD sean menos fiables.
- Prueba del antígeno prostático específico (PSA): la prueba sanguínea del antígeno prostático específico se utiliza a menudo en el cribado del cáncer de próstata. Los expertos ya no recomiendan la prueba del PSA, ya que la mayoría de los cánceres detectados por la prueba no son mortales. No se ha demostrado que la detección precoz y el tratamiento de los cánceres detectados mediante la prueba PSA reduzcan la probabilidad de morir por cáncer de próstata.
- Exámenes de la piel – Algunos médicos recomiendan a las personas con riesgo de cáncer de piel que se examinen la piel con regularidad. Sin embargo, no se ha demostrado que estos exámenes reduzcan el riesgo de muerte por cáncer de piel y a menudo pueden conducir a un tratamiento excesivo. Las personas deben estar atentas a los cambios que se produzcan en su piel y consultar a su médico si detectan un lunar nuevo o un cambio en un lunar existente.
- Colonoscopia virtual: permite examinar el colon y el recto desde el exterior del cuerpo. Por lo general, esta prueba sólo se recomienda cuando es la única prueba colorrectal con la que la persona se siente cómoda.
¿Qué debo preguntar a mi médico sobre las pruebas de detección del cáncer?
Una prueba de detección del cáncer puede ser invasiva y no es necesaria para todo el mundo. Saber cuándo y dónde hacerse una prueba de cribado puede resultar confuso. Antes de programar nada, he aquí algunas preguntas que debe hacer a su médico:
- ¿Hay alguna prueba de detección del cáncer que recomendaría? ¿Cuáles y por qué?
- ¿Con qué frecuencia debo hacerme la prueba?
- ¿Qué busca el cribado?
- ¿Cómo me preparo para la prueba?
- ¿Qué ocurre durante la prueba?
- ¿Existen riesgos asociados a la prueba?
- ¿Cuánto tardaré en conocer los resultados de la prueba?
- ¿Quién revisará los resultados conmigo?
- ¿Con quién debo ponerme en contacto si no tengo noticias de su consulta o del centro de pruebas?
- ¿Qué ocurre si mis resultados son anormales?
- ¿Con qué frecuencia son imprecisos los resultados de las pruebas?
Otras formas de prevenir el cáncer
Según la OMS, entre el 30 y el 50% de todos los casos de cáncer se pueden prevenir. La concienciación sobre los factores de riesgo y los comportamientos que pueden causar cáncer puede disminuir significativamente su exposición.
Tabaco
Fumar es la principal causa de cáncer de pulmón. Se calcula que el humo del tabaco contiene más de 7.000 sustancias químicas, y se sabe que al menos 69 causan cáncer. El consumo de tabaco es el factor de riesgo evitable más importante: mata a más de 8 millones de personas al año en todo el mundo por cáncer y otras enfermedades relacionadas.
Alcohol
El Programa Nacional de Toxicología del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. publicó su Informe sobre Carcinógenos, indicando que el alcohol es un carcinógeno humano conocido. El consumo de alcohol puede causar varios tipos de cáncer, y las pruebas demuestran que cuanto más bebe una persona, mayor es su riesgo de desarrollar un cáncer asociado al alcohol. Los siguientes tipos de cáncer están relacionados con el consumo de alcohol: cáncer de cabeza y cuello, de esófago, de hígado, de mama y colorrectal.
Factores físicos (inactividad, obesidad, factores dietéticos)
Aunque no hay pruebas que puedan relacionar definitivamente la obesidad con el cáncer, el Grupo de Trabajo del CIIC ha llegado a la conclusión de que existen datos consistentes que demuestran que una mayor cantidad de grasa corporal está relacionada con un mayor riesgo de padecer varios tipos de cáncer, como los de endometrio, esófago, cardias gástrico, hígado, riñón, colorrectal, páncreas, mama, ovarios y tiroides.
Infecciones y virus
Las investigaciones han demostrado que varios virus pueden provocar cáncer, como el Epstein-Barr, la hepatitis B y C, el VIH, el virus del papiloma humano (VPH), el virus del herpes humano 8 y el virus linfotrópico T humano (HTLV-1). El desarrollo del cáncer debido a estos virus es increíblemente complicado: los virus secuestran las células e insertan su propio ADN o ARN en la célula huésped, lo que provoca que las células se vuelvan cancerosas.
El medio ambiente que nos rodea está formado por el aire, el agua, el suelo y las sustancias con las que interactuamos a diario, incluidas las condiciones de nuestros hogares, lugares de trabajo, comunidades y escuelas. En el medio ambiente hay sustancias químicas de origen humano y natural que pueden contribuir al desarrollo del cáncer. Lea nuestra cobertura completa sobre cómo el medio ambiente puede contribuir a un diagnóstico de cáncer.
Radiación
La radiación tiene energía suficiente para dañar el ADN de una persona y provocar cáncer. Las personas están expuestas a la radiación de los rayos X, los rayos gamma, las partículas alfa y las partículas beta. Algunos procedimientos médicos como las radiografías de tórax, las tomografías computarizadas, las tomografías por emisión de positrones y la radioterapia pueden causar daños celulares que pueden provocar cáncer, pero los riesgos de estos procedimientos son mínimos. El riesgo mucho más considerable procede de los accidentes en centrales nucleares y la consiguiente lluvia radiactiva. No se ha demostrado que la radiación de baja energía de los teléfonos móviles provoque cáncer en las personas.
Exposición al asbestos y cáncer de pulmón
Está bien documentado que la exposición al asbestos puede provocar cáncer de pulmón y, en muchos casos, mesotelioma. Dado que el mesotelioma puede tardar entre 20 y 30 años en desarrollarse, las revisiones pulmonares anuales son cruciales para su salud. Si tiene síntomas, no dude en ponerse en contacto con su médico para concertar una revisión.
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